Antes que nada, quiero decirte que este blog lo estoy escribiendo como una experiencia vivida, esto que trataré de expresar fue parte de una “maldición” que yo viví.

Pero el día que descubrí que solo yo podría romper ese hechizo, lo rompí y con una decisión firme e irrevocable.

Sufrí por algunos años siendo adolescente, culpando a mis padres, maestros y amigos, como lo hacen la gran mayoría de las personas, desgastándome pensando, “si me lo hubieran dicho…o si me lo hubieran advertido …mi vida hubiera sido muy diferente” si, así de esa misma forma me sentía en esos momentos. no encuentras en realidad a quien darle tu paquete de sentimientos nada gratos.

Llegue a platicarlo con algunas personas pensando en que me ayudarían con sus guía y consejos y creo que estaban peor que yo, porque incrementaban ese sentimiento. Entiendo que no todo el mundo está preparado para dar un buen consejo, pero eso lo comprendí muy tarde. Aunque ya ahora me doy cuenta de que no era algo tan grave, viéndolo desde el punto donde hoy me encuentro, esa época no fue nada agradable para mí.

Fue la época de elegir mi carrera profesional, aquí tuve una gran equivocación al decidir inscribirme en la facultad de Licenciatura de Diseño Gráfico. Que confusión tan grande sentí en esos momentos, me sentía sola a pesar de que estaba rodeada de muchas personas, además estaba muy desanimada por las expectativas que mis padres tenían sobre mí, me sentía fracasada porque en mi interior yo no era feliz con esa elección.

Cuando uno vive sentimientos que te debilitan, comienzas a cometer errores en otras áreas de tu vida también, es muy similar a una bola de nieve que crece y crece.

Creo que muchísimas personas nos sentimos de esta forma y hasta llegas a pensar que las personas más allegadas a ti son los responsables y es por esos sentimientos que la “maldición” crece, ya no solo eres la VICTIMA, si no también comienzas a sentirte CULPABLE por señalar a los que amas.

Hasta que llegó ese gran día en que descubrí que el “maleficio” de esas dos armas letales, que  estaban frenando mi realización, estaba aniquilando mi interior y me di cuenta que solo dependía de mi tomar acción y enfrentar con mi propia responsabilidad vencer a ese “maligno”  que se apodera de las almas, si los saboteadores, que son el mismo engaño de la mente cuando no está entrenada y así fue que desperté de ese hechizo,  nadie lo podía sacar de mi vida hasta que yo tomara acción y tuviera fe en que todo tenía solución, al poco tiempo  después de llegar a esos razonamientos algo más sucedió algo gritaba dentro de mi diciendo tú tienes una misión  y un propósito,  lo digo metafóricamente, en realidad eran sentimientos llenos de emoción y alegría y mucha más Fe, me di cuenta que entre más respuestas buscaba más situaciones llegaban con más claridad.

Las grandes posibilidades y oportunidades comenzaron a presentarse, cuando yo todavía estudiaba la carrera profesional, pero las decisiones que tome alternas fueron enfocadas en mi desarrollo personal; busque a las personas correctas para que me guiaran. Todo comenzó a dar resultado, mis creencias cambiaron, tomé la responsabilidad de mi vida y asumí que nadie le puede dar ese paquete de sentimientos debilitadores a nadie.

Hoy por hoy puedo ser fiel testigo que no hay nada que tú no puedas cambiar, esto es uno de muchos ejemplos que he vivido, en los que gracias a dejar de vivir esperando que me rescaten.

Todos tenemos la oportunidad de despertar de ese estado de parálisis mental y comenzar una nueva vida, sin importar nada de lo que sea externo a ti, solo se requiere de tomar una decisión autónoma y comprometerte con tu alma, y permitir que sea tu guía y comenzar un entrenamiento mental y eso sí que es vital, ya que siempre estaremos expuestos a los saboteadores de sueños.

Solo de ti depende que voz quieres escuchar. Yo seguí la voz de mi Alma, y sé que vivo en un mundo de posibilidades, en el que puedo crear siempre que sea yo la que tenga el control de mi vida de la mano de Dios.

 

¿En qué momento de tu vida te has sentido víctima y culpable? ¿Estudiante lo que en verdad te apasiona?

 

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